sábado, abril 08, 2006

Edelweiss

Sólo se trata de una florcita sencilla, muy básica y simple, no demasiado espectacular pero que se ha ganado su popularidad a base de no amilanarse ante ninguna situación que enfrente.
Eso es precisamente lo que la caracteriza, cuando otras invierten todas sus fuerzas en desplegar una belleza e imagen majestuosa, ella centra todos sus esfuerzos en su adapatabilidad. Así se convierte un poco en una flor-Panzer a la que resulta francamente difícil superar en resistencia, de manera que no sé si pudiera haber algún punto concreto del mapa en el que se pueda descartar su aparición. De tal magnitud resulta su arrojo y constancia que ha llegado a ser el símbolo de una nación al completo (para quien no sabe, hablo de Suiça).
En resumen, un edelweiss, lo que resulta es un perfecto ejemplo de lucha diaria y del ideal comportamiento de la vida frente las adversidades.
Lo que a mí me parece que le aporta la importancia con la que cuenta es que es un todoterreno con posibilidades de subsistir venciendo amplias y diversas situaciones. Algo que, pienso yo, es fundamental en el ámbito en el que nos encontramos a día de hoy.
Desde luego si yo fuera una edelweiss, probablemente tendría los mismos problemas que hoy saboreo, pero con toda seguridad no me asustarían tanto.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

y a los que nos gustan las margaritas donde nos deja todo esto??:s

Marce dijo...

Provavelmente em lugar algum... Tudo consiste em não centrar-se tanto na estética e valorizar um pouco mais alguns aspectos que constantemente esquecemos e que são muito importantes e que muitos dos que nos rodeiam possuem, mesmo que não sejamos capazes de perceber ;)

Anónimo dijo...

tu no sabes las historia de las margaritas, verdad???jajajaja...:P

Anónimo dijo...

a veces la estética es lo más valioso e importante que tenemos ;(

Marce dijo...

Ana, creo que me estas hablando de casos muy tristes :(

Anónimo dijo...

bueno, creo k nosotros los humanos, nuestra mayor fotaleza natural, no está en el aspecto ni en la fortaleza, sino en nuestra mente, hay cosas naturales que nos ganan en belleza, y en fortalez muchas otras... pero en cuanto a nuestra mente no nos gana ninguna, y eso desarrolla una belleza y una fuerza que otros seres vivos no pueden.
Sld2