lunes, febrero 20, 2006

Niña otra vez

Hoy me he vuelto niña otra vez. Ya la echaba de menos. Bueno, es verdad, como adulta tampoco doy mucho el pego,... pero no me refiero a niña como algo infantil, que lo soy y mucho,... sino a niña en esperanza y fe.Los niños tienen una ilusión que ya quisiéramos muchos adultos disfrutar. Nos dejamos envolver tanto por nuestras preocupaciones, rutinas, desesperanzas y frustraciones que olvidamos aquella época cuando todo era posible y podíamos llegar a ser lo que quisiéramos si lo soñabamos lo suficientemente fuerte.
¿Qué me ha pasado? ¿Dónde dejé de creer que merecía la pena luchar por mis sueños? ¿Cuándo me rendí a un mundo que no me satisface, que no da brillo, ni llena mi vida, ni me hace mejor, ni me ayuda a ser útil para los demás? Y lo más importante ¿Por qué? Me hago estas preguntas y a la vez temo escuchar las respuestas porque todas se simplifican en una: Por miedo. Me volví cobarde porque para luchar por lo que uno cree debe haber valentía y no rendirse jamás ante las posibilidades escasas de éxito que otros puedan augurar o ante las risas de sarcasmo de quienes tachan de iluso o ingenuo porque se han rendido antes a la corriente de la vida que te recuerda lo difícil que es llegar a ser lo que deseas para que te conviertas en otra cosa que es posiblemente igual de difícil y que seguramente te proporciona menos alegría que seguir los sueños que tenías de niño si no los has matado aún.
Me he decidido a revivir algunos sueños porque no es tarde, todavía no, y puedo realizarlos y si alguien se atreve a desanimarme, pues que se joda, porque voy a ir adelante y sobre todo intentar no cagarla dejando que el olvido haga lo que mejor se le da, borrar lo que realmente importa de la mente o inlcuso del corazón.
Quiero sonreir como una niña porque mis esperanzas están vivas porque mi fe arde. No quiero rendirme a una sociedad que me alienta a ser seria y guardar un protocolo que no es útil. Seguiré guardando la compostura porque todo el mundo merece un respeto y saber estar es mucho saber como para olvidarlo a la primera de cambio, pero no cuando se convierte en algo que no sirve para nada.
Junto con este propósito se halla el segundo que consiste en suprimir tabues innecesarios. Una cosa es ser discreta y no acceder a la excusa de la osada ignorante que dice la verdad subjetiva de algo que ni le han preguntado, ni le importa a nadie, más que al que abre la bocaza para demostrar lo grande que es y lo poco que le importa ser desagradable sin más. Otra cosa distinta es jugar al teatro que difumina tanto las costumbres con la realidad que la mentira llega a considerarse como una opción desagradable para quienes la viven, pero menos incluso que decir la verdad.
¿A quien no le han presentado alguna vez a alguien y se ha dado la situación de una conversación de lo más absurda porque a ninguno de quienes hablan le apetece de veras hacerlo? ¿Por qué no se callan? Sencillo, porque sería una grosería, serían desagradables. En realidad seguro que si se expusiese la situación de manera clara ambos se quitarían un peso de encima y estarían más a gusto que prolongando un diálogo forzado.
Lo mismo ocurre con los conocidos a quienes se les apela "amigos", ya sea por una amistad pasada que se terminó o por una intencionalidad de que se de en el futuro. ¿Por qué forzar una amistad cuando no existe? Pues por educación. Por esa misma educación que no atiende a razones, ni a lógica en algunos casos nos olvidamos de ser nosotros mismos a la hora de parar los pies a quienes no hacen más que amargarnos con tonterías y a quienes, en lugar de sonreir, desearíamos decir cuatro realidades de lo que sabemos para evitar la ambigüedad que supone la "amistad" entrecomillada en ese contexto y que, de no producirse, se irá componiendo de más y más comillas hasta que la palabra central carezca apenas de importancia. Cuando los conocidos que se llaman amigos te la juegan y no existe ni el cariño, ni la confianza mutua como para permitirse ciertos lujos,... es mejor no ceder por educación, pues la verdad es más importante, en algunos casos, que la mejor educación.
Y lo siento, lo siento porque he sido una maleducada soltando todo este rollo. Aff...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Mal educada???? ¿por qué? a mi particularmente de lo que has escrito hasta ahora (y mira que has escrito cosas muy buenas) esta es la que más me ha gustado...

los normales dijo...

A mi tb me gusta a veces, mirar las metas que había escrito para ese año, y sino las he cumplido, tomarlas.
Es bueno pichona, que tengas ilusion por sueños que han quedado ahi.

Anónimo dijo...

Serás siempre la dulce Marcela que conoci en el Parque Redencion.Derramabas ternura por donde cruzabas. Y hoy continuas así, con un corazón que abarca el mundo entero.

Anónimo dijo...

Dulce Marce, una vez lei esto "la cortesia oculta siempre la negativa a hacer frente a otras realidades"

Far. So far way ;-(