domingo, noviembre 02, 2008

Marioneta

De un tiempo a esta parte, me siento como si fuera una marioneta en manos de un aprendiz de titiritero. Me mueven bruscamente de aquí para allí, sin tener tiempo a saborear las cosas, o a intentar comprender lo que me rodea. Recibiendo garrotazos que vaya usted a saber de dónde caen. Sólo oigo los gritos del público: ¡cuidado, el lobo! y luego alguien me defenestra y se parten de risa. Y no me sabe mal sentirme así, lo que me jode es que yo una vez tuve las riendas de mi vida y no sé en qué punto las perdí. Y si hay algo peor que vivir en las manos de un aprendiz de titiritero, es ser una marioneta con recuerdos. Qué mala es la memoria a veces, de verdad.

1 comentario:

Azazel Pistis dijo...

Bom, dias depois parece que se concretiza...hehehe, nós indo de um lado para o outro, mas espero que agora fixemos nossa morada em um único lugar.
Bs